miércoles, 15 de noviembre de 2017

El autobús de Leonard Cohen


Fui el último pasajero del día.
Estaba solo en el autobús.
Me sentía contento de que se estuvieran gastando tanto dinero
sólo para llevarme por la Octava Avenida arriba.
¡Conductor! Grité, estamos usted y yo esta noche.
huyamos de esta gran ciudad
a una ciudad más pequeña más propia para el corazón,
conduzcamos más allá de las piscinas de Miami Beach,
usted en el asiento del conductor,
yo varios asientos más atrás,
pero en las ciudades racistas cambiaremos de lugar
para mostrar lo bien que le ha ido arriba en el norte,
y busquemos para nosotros
alguna diminuta villa pesquera americana
en la Florida desconocida
y aparquemos justamente al borde de la arena,
un enorme autobús como una señal,
metálico, pintado, solitario,
con matrícula de Nueva York.

 De "Flores para Hitler"


The bus

I was the last passenger of the day,
I was alone on the bus,
I was glad they were spending all that money
just getting me up Eighth Avenue.
Driver! I shouted, it’s you and me tonight,
let’s run away from this big city
to a smaller city more suitable to the heart,
let’s drive past the swimming pools of Miami Beach,
you in the driver’s seat, me several seats back,
but in the racial cities we’ll change places
so as to show how well you’ve done up North,
and let us find ourselves some tiny American fishing village
in unknown Florida
and park right at the edge of the sand,
a huge bus pointing out,
metallic, painted, solitary,
with New York plates.

No hay comentarios:

Publicar un comentario